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Conferencias y cursos | Programa Culturearte | Curso 2025/26

Una reflexión con Carmen Pomar, doctora en Psicología Educativa, sobre educación emocional y desarrollo personal.

La universidad es, según Carmen Pomar, “una etapa muy sensible y, sin embargo, una de las más olvidadas” en términos de formación emocional. En su intervención, subrayó que, aunque vivimos en una sociedad tecnológica y llena de información, los jóvenes se enfrentan a nuevos retos relacionados con la autoestima, la seguridad y el bienestar psicológico.

“Nos encontramos con una generación más formada, pero también más frágil emocionalmente”.

Por eso puso en valor programas como Culturearte, un espacio formativo complementario que ofrece a los jóvenes la posibilidad de crecer no solo académica, sino también emocionalmente.

La forma en que los jóvenes construyen su personalidad ha cambiado. El mayor acceso a la tecnología, los nuevos modelos de ocio y la escasez de tiempo para la introspección está transformando la manera en que los jóvenes construyen su personalidad: “Tenemos más cosas materiales, pero menos raíces emocionales. Vivimos en un mundo más ruidoso, y, paradójicamente, nos sentimos cada vez más solos”.

Carmen citó al psicólogo Robert Sternberg para insistir en la necesidad de replantear el enfoque educativo: “Nos enseñan a identificar nuestras debilidades, cuando deberíamos aprender a compensarlas con nuestras fortalezas”. En este sentido, alertó sobre el aumento de los problemas de salud mental tras la pandemia y destacó la necesidad de proporcionar herramientas que permitan a los jóvenes conocerse mejor y gestionar sus emociones.

Finalmente, recordó que la educación emocional no es un proceso individualista: se construye en la interacción con los demás. Aprender a reconocer, expresar y gestionar las emociones propias y ajenas resulta esencial para fomentar una convivencia equilibrada, empática y auténtica.